Las letras tienen su sonido, y cuando es combinan entre ellas forman palabras con su significado. Una serie de pequeñas historias, con texto y elementos visuales, protagonizadas por las letras.
En algunos casos las propias letras se convierten en personajes, como la historia del a minúscula y la U mayúscula, donde la más pequeña no será la que salga más maltrecha. También la anécdota de la turista, que exclama tantas OOOO delante de los monumentos de la ciudad que se convierten en una O enorme y se lleva la estatua que tan admira. ¿De qué manera lo hará la ciudadanía para poder contemplarla si ha quedado colgada del campanario?
Un espectáculo sencillo lleno de sones, letras e historias que a buen seguro os hará pasar un buen rato.
Recomendado a partir de 4 años.
Actividad en catalán
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